Menu

Proyecto Visión 21

Algunos titulares e historias causan preocupación y alarma

Algunos titulares e historias me causan preocupación. Por ejemplo, la semana pasada me enteré del caso de una maestra a quien se le negó el ingreso al país, a pesar de que llegaba con una beca para estudiar en una universidad.

Las autoridades de inmigración consideraron que la docente carecía de los documentos necesarios, por lo que la maestra fue detenida, procesada y luego deportada.

En otro caso, una mujer de 58 años viajó para visitar a su hija. Tras diez días de detención, la mujer fue deportada cuando las autoridades correspondientes adujeron que su carta carecía de validez.

En julio pasado y en incidentes separados, dos ancianas, una de 72 años y la otra de 88 años, fueron detenidas por las autoridades de inmigración, sin tener acceso a los medicamentos que necesitaban.

Antes de que alguien saque conclusiones equivocadas, debo aclarar que todos estos casos, y otros muchos similares, son absolutamente reales. Y también debo aclarar que estas deportaciones y aparentes violaciones de los derechos de las personas no se produjeron en Estados Unidos sino en España, y que los perjudicados fueron personas de Argentina.

Muchas veces nos concentramos tanto en lo que pasa en este país (Estados Unidos) y en sus fronteras, que al hacerlo y por hacerlo perdemos de vista el alcance global de la inmigración y no nos enteramos de las medidas y actitudes que otros países tienen e implementan hacia los inmigrantes e incluso hacia los visitantes.

La inmigración no afecta sólo a Estados Unidos y sería casi ilusorio pensar que cualquier país pueda por sí solo responder al desafío global del masivo movimiento de personas.

Según el Dr. Richard Vail, profesor de negocios en el Colegio Estatal Mesa en Grand Junction (oeste de Colorado), la globalización “multiplica la complejidad del impacto de la inmigración”, ya que, debido a los avances tecnológicos, cada vez es más sencillo transportar bienes, información y personas.

“Y la complejidad crea inestabilidad, incluso si los eventos acontecen en otro país”, sostuvo Vail durante su presentación el fin de semana pasado en la segunda conferencia anual “Inmigración y Globalización” en el Colegio Mesa.

Para Vail, la globalización, y, como consecuencia, la inmigración, “tienen un impacto negativo en el deseo de muchos estadounidenses de vivir una vida larga y feliz”, debido a la creciente demanda por recursos (como el agua y la energía) cada vez más limitados.

Como resultado, ha aumentado la presión para que los productos y servicios se ofrezcan cada vez con mayor eficiencia y, junto con esa presión, también han aumentado los controles gubernamentales.

El resultado final, según Vail, es “una creciente preocupación por la posible inestabilidad social” y, por eso mismo, la falta de inversiones a largo plazo.

Tras leer las noticias sobre la deportación de argentinos en España y tras escuchar al Dr. Vail, algo me resultó muy claro: el mundo es mucho más complejo e interconectado de lo que habitualmente creemos. Por eso los titulares e historias son motivo de preocupación, aunque sean de otros países.

Go Back

Comment

Blog Search

Blog Archive

Comments

There are currently no blog comments.